Viejo Portón |
Dejamos hervir los alcauciles cubriéndolos de agua y añadiendo una copita de vino blanco corriente. Cuando los alcauciles estén casi tiernos añadir 1 Kg. de papas nuevas cortadas a cascos. Se cubre de agua y se añaden unas hebritas de azafrán o en su defecto colorante artificial. Rectificar la sal y hervir hasta que las papas estén tiernas, cuidando de que no se queden sin caldo. Si queda muy caldoso, machaca un par de papas y echalas en el guiso, removiendo un poco para que coja cuerpo. Dejar reposar un poco y a comer.
"Comerse un alcaucil es hacer un Strep-tease gastronómico. Se le va desvistiendo y saboreando cada hoja que se quita lúdicamente una a una, hasta llegar al jugoso cogollo" *
*De mi estimado amigo Juan Carlos Alonso. Doctor en Artes de la buena mesa.
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